miércoles, 29 de febrero de 2012

413 personas participan en Talca de la primera jornada de la Consulta Nacional sobre la Reconstrucción


Con un exitoso inicio se llevó a cabo el lunes 27 de Febrero, la primera jornada de la Consulta Ciudadana sobre la Reconstrucción, en la ciudad de Talca, en la que participaron 413 personas.

A dos años del megasismo que sacudió fuertemente la zona centro sur de Chile el 27 de Febrero de 2010, diversas organizaciones sociales unidas en la Red de organizaciones pro Reconstrucción, lanzaron el pasado 25 de Febrero la Consulta Nacional sobre la Reconstrucción la cual busca conocer la opinión de la ciudadanía, respecto del proceso de reconstrucción y que estará disponible en línea hasta el domingo 04 de Marzo en la pagina http://consulta.votociudadano.cl/

En la ciudad de Talca, se lanzó la consulta de manera presencial en el segundo aniversario de la catástrofe, el día lunes 27 de Febrero de 2012, con una mesa de votación en las afueras del Marcado Central, a cargo de Evelyn Morales de la Corporación Domodungu, Yafza Reyes, de la Agrupación de Mujeres del Maule y luego en la Plaza Cienfuegos con el apoyo de Catalina Salazar Moreno, del Mercado Central

Fotografía de Stefano Micheletti (Mesa en Mercado Central )
La consulta logró la exitosa participación de 413 personas en sólo una jornada, siendo la más votada en regiones, superando con creces las consultas de Rancagua y Cauquenes realizadas entre el 25 y 27 de Febrero.

En la capital maulina la mayoría de los/as votantes expresaron que el proceso de reconstrucción ha sido lento y malo y que además, no se ha respetado la participación de la gente en la toma de decisiones. 

Por preguntas, las primeras impresiones de la ciudadanía Talquina fueron: 

1. ¿Cómo ha visto usted que ha sido el Proceso de Reconstrucción después del terremoto/tsunami del 27 de febrero del 2010? 
c) El proceso ha sido malo y lento. 
d) El proceso ha sido pésimo y muy lento. 

2. ¿Qué opina usted del Plan de Reconstrucción del Gobierno? 
c) No es bueno, pero algo hacen. 
d) Es pésimo. 

3. ¿Qué cree usted que debiera hacer el Gobierno para mejorar el Plan de Reconstrucción?
a) Crear políticas y estrategias más eficientes 
b) Organizar espacios de participación ciudadana en que las decisiones tomadas sean realizadas. 
c) Entregar más recursos y más rápidamente. 

4. ¿Cómo piensa que ha sido la participación ciudadana en el Proceso de Reconstrucción?
c) No han habido muchas oportunidades de participación, a pesar de que la ciudadanía las ha solicitado. 

5.- ¿Piensa usted que estamos mejor preparados para enfrentar una catástrofe natural después de lo aprendido con el terremoto/tsunami del 27 de febrero del 2010? 
b) Las personas están mejor preparadas, pero el Estado sigue igual. 
c) No, nada ha cambiado. 

6.- ¿Fue usted afectado/a directamente por el terremoto/tsunami del 27 de febrero del 2010? 
a) Si 

Todas estas respuestas contrastan con las opiniones del Alcalde de Talca (RN), señor Juan Castro, hechas el día 27 de Febrero al periódico latino "El Nuevo Herald", en donde expresó que: "Hoy ya nadie se acuerda del terremoto. La ciudad ha ido creciendo, hay más comercio... y gracias al terremoto Talca es hoy una ciudad con más crecimiento y desarrollo económico" (Para ver la entrevista completa consultar el artículo "Ciudades chilenas cicatrizan heridas del terremoto”, disponible en la página web: 


La jornada de consulta del "El voto ciudadano" en la ciudad de Talca, fue parte de un conjunto de actividades convocadas por los movimientos sociales de la capital Maulina, para conmemorar los dos años del terremoto y posterior tsunami que azotó el centro sur de Chile el 27 de Febrero de 2010 y evidenciar con ello la escasa reconstrucción local y nacional.

Entre las actividades realizadas estuvieron la "funa" Me desayuno con SERVIU en las afueras del Servicio Nacional de Vivienda y Urbanismo, para denunciar el lento y engorroso proceso de reconstrucción; un acto lúdico de los/as trabajadores/as del Mercado Central que luchan para no perder la identidad de este emblemático centro de abastecimiento declarado monumento nacional en 1998; una Misa en la población Manuel Larraín, donde se emplaza uno de los edificios históricos de la capital maulina y que luego de dos años está próximo a ser demolido, y un acto ecuménico en la Plaza Cienfuegos para recordar a las víctimas del 27F y a aquellos/as que lamentablemente han fallecido en una mediagua, a la espera de la reconstrucción de sus viviendas. Al acto no asistieron autoridades municipales ni de gobierno.


Para el fin de semana del 03 y 04 de Marzo se espera la instalación de mesas presenciales en distintos barrios de la ciudad de Talca, y también en la ciudad de Curicó, a cargo de la Mesa de Mujeres Tëkufënn.


Cabe mencionar que el total de damnificados/as tras el 27F son 370 mil familias (según el Plan de Reconstrucción MINVU, Marzo 2010); los/as damnificados/as inscritos en el SERVIU: 285 mil familias (Registro de Damnificados SERVIU, Sept 2010), pero los/as damnificados/as hábiles son 220 mil familias – habilitadas para postular a subsidios de reconstrucción – (150.000 menos que el porcentaje real de damnificados/as).

Los subsidios asignados al 31 de enero del 2012 son para 222.418 familias, pero las viviendas entregadas al 31 de Enero de 2012, son sólo 12.248 (MINVU; 31 Enero 2012), lo que corresponde al  5,63% de damnificados/as.
Respecto de las viviendas reparables el número es 179.693 (ONEMI - Plan de Reconstrucción MINVU, Marzo 2010), de las cuales 108.848 tienen  un subsidios asignados para reparación. De estas obras, están en ejecución: 77.984 y terminadas: 63.904 (Fuente: MINVU 31 Enero 2012)
Porcentaje de damnificados (totales) con obras de reparación terminadas: 35,6%**

** Hasta la fecha no existe una estadística que permita conocer cuántas de las reparaciones terminadas corresponden al 100% de los daños causados por el terremoto. Las experiencias recopiladas indican que la mayoría de las reparaciones terminadas son parciales.

Más información en la página www.votociudadano.cl

domingo, 26 de febrero de 2012

ESTE SÁBADO 25 DE FEBRERO COMENZÓ LA CONSULTA NACIONAL SOBRE RECONSTRUCCIÓN

El proceso de votación se lleva a cabo a través de la página consulta.votociudadano.cl y de mesas presenciales ubicadas entre Santiago y Concepción. Y se extenderá hasta el 4 de marzo 
Con la instalación de urnas de votación en diferentes lugares de Santiago y de las regiones afectadas por el terremoto, comenzó oficialmente la primera Consulta Nacional sobre Reconstrucción. Los principales organizadores de la consulta se reunieron hoy en Plaza Italia, para dar inicio formal al proceso.


En este lanzamiento actuaron como voceros, Ivan Salazar de la Red de Territorios Ciudadanos, Patricia Beltrán del Consorcio Reconstrucción Cómo vamos, Jaime Díaz de la Asamblea de Vecinos de la Villa Olímpico, Alicia Sanchez de Acción A.G y Rossana Dresdner de Voto Ciudadano. También se hicieron presentes una decena de organizaciones sociales y no gubernamentales que apoyan la consulta desde la Red de Organizaciones Pro Reconstrucción.


En la ocasión los organizadores manifestaron su preocupación por el estado de avance de la reconstrucción y manifestaron la necesidad de consultar la opinión de la ciudadanía. Al respecto Iván Salazar señalo que "en este fuego cruzado de opiniones y datos encontrados que entrega el gobierno y la oposición, hace mucha falta consultar la tercera opinión, que es la opinión de la ciudadanía y de los afectados por el terremoto". Por su parte, Jaime Díaz señaló que "la consulta se hace para profundizar el debate sobre la reconstrucción, para darle voz a los damnificados y no para atacar al gobierno, quien debería aceptar las críticas que se le hacen para así mejorar el proceso de reconstrucción". Patricia Beltrán destacó el rigor de la consulta, "la que se ha pensado para medir detalladamente la percepción que tiene la ciudadanía de los temas más relevantes de la reconstrucción, como son los tiempos, la calidad, el avance, el plan de reconstrucción y la participación ciudadana, entre otras cosas".


Desde el sábado 25 de Febrero y hasta el domingo 4 de marzo, la población puede votar en la plataforma virtual Voto Ciudadano, específicamente en la dirección: consulta.votociudadano.cl
Además, este fin de semana, habrá mesas de votación en Villa Olímpica, Barrio Yungay, Rancagua, Talca, Cauquenes, Concepción y Llico. Prontamente se sumarán las mesas de Valparaíso, Pichilemu, Curicó, Iloca, Constitución, San Rosendo y Tirúa.
La Consulta Nacional sobre Reconstrucción es el tercer proceso de votación digital que se lleva a cabo a través de la plataforma Voto Ciudadano, un espacio que garantiza la transparencia y seriedad del proceso, que además cuenta con el respaldo tecnológico de NIC Research Labs, perteneciente a la Universidad de Chile.


Voceros de la Red de Organizaciones pro Reconstrucción
Nicolás Valenzuela, Reconstruye
Patricia Beltrán, Reconstruccion Como Vamos
Iván Salazar, Red de Territorios Ciudadanos
Jaime Diaz, Asamblea Villa Olimpica
Stefano Micheletti, Surmaule
Angelo Fuentealba, Observatorio Cauquenes
Rossana Dresdner, Voto Ciudadano


Convoca y patrocina:
Red de Organizaciones pro Reconstrucción, integrada por:
Reconstrucción Como Vamos
Movimiento Nacional por la Reconstrucción Justa
Red de Territorios Ciudadanos
Observatorio de la Reconstrucción - Universidad de Chile
Reconstruye
Surmaule
Agrupación de Mujeres del Maule
Corporación Poloc
Observatorio Ciudadano de Cauquenes
Sentidos Comunes
Construyamos Ciudadanía
ACCION A.G
Centro Cultural El Sitio de Yungay
Nuestro Valparaíso
Flacso - Chile
Asamblea de Vecinos por la Reconstrucción de la Villa Olímpica
Diario El Ciudadano
Tekufenn, Curicó
Cooperativa Territorio Sur
Cedesus, Pichilemu
Fundación AVINA

domingo, 19 de febrero de 2012

Descarga la Agenda de las Mujeres para una Reconstrucción con Equidad en PDF


Descarga la Agenda de las Mujeres para una reconstrucción con Equidad, en formato PDF, para conocer las demandas y propuestas de la Agrupación de Mujeres del Maule, para los/as candidatos/as de las próximas elecciones municipales.

No olviden pinchar botón derecho, "abrir enlace en una nueva pestaña", para no abandonar nuestro blog.

Enlace para descargar la Agenda de las Mujeres para una Reconstrucción con equidad en .pdf

sábado, 18 de febrero de 2012

CONSULTA NACIONAL SOBRE LA RECONSTRUCCIÓN: 25 DE FEBRERO AL 4 DE MARZO DE 2012

A dos años del terremoto y tsunami que afectó al centro sur de nuestro país, queremos conocer la percepción que tiene la ciudadanía sobre el Plan de Reconstrucción 2010 – 2013 y sus resultados, liderado por el Gobierno de Chile. De esta manera, integraremos la voz de todos los actores en el debate sobre cuánto y cómo se ha avanzado en la reconstrucción post 27 deFebrero.

La consulta busca mostrar al país la experiencia y la opinión del millón de damnificados/as que dejó la catástrofe del 27F, y de las organizaciones sociales y ciudadanas que apoyan el proceso de reconstrucción. Para ello esta herramienta, nos permitirá conocer y difundir con datos objetivos, el sentir de la ciudadanía sobre la reconstrucción.

Como Red de Organizaciones, creemos que la reconstrucción ha pasado a segundo plano, y por eso, es necesario reponerlo en el centro del debate público, más allá de la coyuntura de los dos años. Los/as damnificados/as no pueden ser olvidados, además, estamos convencidos de que la reconstrucción es un tema que involucra a todo el país y por ello, esta consulta es una oportunidad para que participe la sociedad en su conjunto.

La Agrupación de Mujeres del Maule, y la Mesa de Mujeres Tëfufënn de Curicó, son parte de las 30 organizaciones patrocinantes de la Consulta ciudadana a Nivel Nacional.

En Talca y Curicó se dispondrán de mesas de votación para la consulta presencial, el fin de semana del 03 y 04 de Marzo.
En Talca además se instalarán mesas simbólicas el día 27 de Febrero, desde las 11:00 a las 13:30 hrs. y desde las 17:30 a las 20:30 hrs., por el paseo de la 1 Sur, en los siguientes puntos: 

Plaza Cienfuegos; Mercado Central; 6 Oriente y 8 Oriente (todas por la 1 Sur)


Más información en: http://www.votociudadano.cl/sitio/wordpress/?p=620





viernes, 17 de febrero de 2012

La Catástrofe del 27 F desde la mirada de las mujeres, la reconstrucción que no existe y las vulnerabilidades de las mujeres que resisten

Como bien recordamos, la madrugada del sábado 27 de Febrero de 2010, a las 3:34 horas, un terremoto de 8,8 grados en la escala Richter sacudió fuertemente nuestro país durante 2,45 minutos desde la región de Valparaíso hasta la Araucanía. Sólo 15 minutos más tarde, las primeras olas producto del maremoto, sacudían y devastaban las costas de la región del Maule y el Biobío, mientras las autoridades nacionales, tres horas después, insistían en la cancelación de la alerta de tsunami. 

Como resultado de la catástrofe 524 personas perdieron la vida, de las cuales 272 pertenecen a la Región del Maule. Aún se encuentran desaparecidos/as 31 habitantes en la ciudad de Constitución, también en la Región del Maule, quienes la madrugada del 27 de Febrero celebraban la “Fiesta Veneciana” en la isla Orrego. En este lugar 91 personas fallecieron y los/as sobrevivientes fueron encontrados/as horas después sobre los árboles de la isla o flotando entre los escombros que arrastró el río. Las devastadoras consecuencias del terremoto y el tsunami generaron pérdidas estimadas en US$ 30 mil millones, lo que corresponde al 18% del PIB nacional. 

Para el MINVU el terremoto dañó cinco ciudades con más de 100.000 habitantes y más de 220.000 viviendas resultaron destruidas o seriamente dañadas, dejando damnificadas a más de 80.000 familias. Para el Movimiento Nacional por la Reconstrucción Justa, el número de viviendas afectadas tras la catástrofe bordea las 500.000. 

En la Región del Maule se estima que 76.581 viviendas quedaron dañadas, de las cuales 23.879 fueron totalmente destruidas y 52.702 presentan daños mayores, existiendo en la región alrededor de 65.000 familias damnificadas. Asimismo el movimiento telúrico perjudicó más de 6.000 escuelas de las cuales más de 3.700 resultaron con daños severos (1 de cada 3 escuelas de las zonas afectadas), situación que impidió que más de un 1.250.000 jóvenes iniciaran su año escolar con normalidad. En relación a la salud pública el 75% de la red hospitalaria se vio afectada. 22 hospitales resultaron dañados severamente, 34 con daño menor y 17 quedaron inutilizables, entre ellos, el Hospital Regional del Maule, que fue demolido en el año 2010, sumando a los 13 hospitales que en nuestra región se vieron afectados, varios de ellos con pérdidas irreparables. 

Desde esta perspectiva la mirada formal de los daños ha estado enfocada casi exclusivamente en los perjuicios sobre la infraestructura (ya sea pública o privada), silenciando con ello, el impacto de esos daños en la vida inmediata de los/as habitantes de las regiones más afectadas. Esto, porque la infraestructura dañada, derrumbada, demolida y eliminada de la urbe, no sólo tiene usos económicos, políticos y comerciales, sino que en esos espacios precisamente, se desarrolla(ba) la vida social y simbólica de sus habitantes, las relaciones humanas del barrio y la identidad de los pueblos y su gente. La pérdida de “la ciudad” se extiende por ende a todos/as los/as habitantes, quienes tras las decisiones políticas de las autoridades de favorecer al mercado inmobiliario y no a los/as ciudadanos/as, deben abandonar sus barrios, redes sociales, identidades y esperanzas.

Sin embargo, en el contexto social de la crisis provocada por el terremoto/tsunami de 2010, la violencia hacía las mujeres, ha encontrado nuevas formas de expresión. Algunas de éstas son producto directo de las formas en que se analizan los impactos en la pérdida de infraestructura, y otras, más profundas y a la vez más invisibles, producto de las tensiones que se producen frente a situaciones de precariedad y falta de recursos en la cotidianeidad de la vida de las mujeres. 

Para las mujeres, tradicionalmente las encargadas y responsables de la reproducción doméstica, la pérdida de infraestructura educativa y especialmente de salas cunas y jardines infantiles en la región del Maule, implicó grandes reacomodos en sus vidas personales y laborales. Esta medida, asumida por las autoridades locales y la “ciudadanía” en general como forma de enfrentar la crisis de infraestructura se hizo a costa del tiempo de las mujeres, el que es absolutamente invisible en el modelo patriarcal de nuestras sociedades. Las mujeres (y no los hombres), al no tener dónde dejar a los/as niños/as, se vieron obligadas a volver a sus casas, sumándose a esto el cuidado de adultos/as mayores que también perdieron sus hogares. Asimismo, la pérdida de la infraestructura hospitalaria se tradujo en la priorización de emergencias físicas que impidieron el normal desarrollo de la atención primaria. Entre los efectos más significativos para las mujeres se encuentra la suspensión de entrega de métodos anticonceptivos en algunos centros de salud hasta dos meses después de ocurrida la tragedia. Esto constituye una explicita violación a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, según todas las convenciones de derechos humanos, y más aún en Chile, donde el aborto terapéutico aún es ilegal. 

El aumento de las denuncias por abusos deshonestos y violaciones al interior de las mediaguas u hogares altamente hacinados, también forman parte de la larga lista de violencias hacía las mujeres que se acrecientan a diario tras la catástrofe y que son invisibles para las autoridades locales y nacionales. Las cifras aquí hablan por si solas, un aumento de un 15% en las denuncias por lesiones, un 19,8% en las denuncias por amenazas, y un 300% en las denuncias por los delitos sexuales, durante el año 2010 (Todas estas denuncian bajaron en un 15,13%, 4,3% y 300% respectivamente, durante el año 2011). 

Por ello, la sensación de temor de las mujeres al transitar por sitios eriazos en barrios completamente abandonados por la migración de sus habitantes a otros sectores o ciudades, no es sólo miedo, sino que implica en la práctica una nueva forma de violencia que tiene una connotación sexual sobre sus cuerpos y que es negada por el Estado. 

Asimismo según datos de la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) 93.928 trabajadores/as perdieron su empleo debido al terremoto y posterior tsunami. Por regiones la más afectada es Biobío, donde la OIT estima que 34.437 personas perdieron su empleo; le sigue el Maule con 28.090 puestos de trabajo perdidos. Además, la OIT indica que la catástrofe golpeó con más fuerza a las pequeñas empresas, que concentran el 81% de las pérdidas de empleos. Las mujeres en este escenario volvieron a ser las más perjudicadas: posterior a la catástrofe 22.924 mujeres perdieron su empleo en el Maule y sólo 2.010 lo recuperaron, es decir, un 90% no lo había recuperado hasta un año después, desconociéndose hasta hoy el porcentaje real de mujeres cesantes que aún existen en nuestra región tras la tragedia. 

Es por ello que decimos que el terremoto ha tenido impacto en casi todos los ámbitos de la vida social y sus efectos son complejos y multidimensionales, teniendo consecuencias muy diferentes en los sectores medios y bajos, pero además entre hombres y mujeres, siendo éstas ultimas, las más perjudicadas en la escala social. Esto porque en una situación de desastre, “esta diferencia genérica afecta directamente el desarrollo de la participación de las mujeres, ya que a pesar de que las mujeres dedican gran parte de su tiempo en las tareas de cuidado y de administración de sus hogares, tienen, además, una mayor disposición para ejercer adicionalmente una doble y hasta triple jornada de trabajo cotidiano: asalariado, activismo político, sindical y como participante dentro de los grupos voluntarios de la comunidad, lo cual no siempre es plenamente valorado y reconocido… Y aunque los hombres en su mayoría cumplen con una única jornada laboral, oponen fuertes resistencias a comprometerse y a participar en las tareas domésticas, de alimentación y de cuidados a su familia y a otros miembros de la comunidad; ello, debido al poco valor proporcionado a la reproducción doméstica dentro de la jerarquización y división del trabajo en una sociedad con valores patriarcales” (Castro; 2005: 2). 

Sin embargo, además de las circunstancias naturales se debe considerar el cambio de coalición de gobierno en el país, 15 días después del desastre. Esto significó un desorden de dimensiones gravísimas en donde ni las autoridades políticas de concertación ni de alianza, se hicieron cargo de la catástrofe durante ese período de tiempo, delegando en el sector privado gran parte de la ayuda entregada durante Marzo y Abril del año 2010. Esto sin embargo es mucho más profundo cuando se analiza el cambio de gobierno, con la llegada democrática de la derecha chilena luego de casi 60 años, y de 20, tras la última dictadura militar. El arribo de la derecha al poder significó para la lucha del movimiento de mujeres a nivel regional y nacional, retrocesos simbólicos y sociales inauditos en materia de políticas públicas de género, los que suceden, paradójicamente, tras la salida del primer gobierno chileno, al mando de una mujer. 

Ante estas y otras situaciones, la ciudadanía desprotegida e indignada ante las negativas estatales de incorporar su voz en las discusiones y planes de reconstrucción, sumaron fuerzas entre colectividades, corporaciones, colegios profesionales, trabajadores/as informales, y por su puesto las organizaciones de mujeres, visibilizando la violencia que vivimos a diario, generando diversas instancias de encuentro y participación. 

Es así como las mujeres en el Maule construyeron una Agenda ciudadana para la reconstrucción con equidad de género, instrumento que constituye un aporte para los distintos actores e instituciones en cuanto al conocimiento de las realidades post catástrofe; las formas de organización comunitaria y las deficiencias y necesidades de la población desde un enfoque de género. 

A dos años del desastre natural, la catástrofe es eminentemente “social” y “política” y hemos evidenciado el aumento de las violencias físicas y sexuales, producto del hacinamiento y la precariedad, así como el aumento de la inseguridad surgida tras el aumento de sitios eriazos dentro de la ciudad vacía; el aumento de las violencias psicológicas, derivadas del temor a las réplicas del terremoto natural, pero principalmente, de la angustia, rabia, impotencia e indignación, emanadas de la falta de una política real y seria sobre reconstrucción, sumado a la entrega – de parte de nuestras autoridades - de la “construcción” (no reconstrucción) de nuestros territorios, al mercado neoliberal; el aumento sustancial de la violencia económica, producto de la pérdida excesiva e invisibilizada de puestos de trabajo de las mujeres; el aumento de la violencia estructural que vivimos a diario, producto de la negación absoluta de la participación de las mujeres en el trabajo comunitario, social y político durante estos dos años; el aumento de las violencias simbólicas que insisten en el estereotipo mariano de la mujer que impulsa el Estado, a través de sus instituciones, el cual insiste en la reproducción de ideologías patriarcales, sumado a la postergación de la salud sexual y reproductiva de las mujeres en momentos de crisis; y por su puesto, la violencia del sistema sexo/género ha derivado en situaciones de estrés post traumático, no sólo por el horror de la vivencia del terremoto/tsunami y la pérdida de seres queridos, sino además por la “responsabilidad” de recomponer las dimensiones reproductivas del tejido familiar y social (alimentación, higiene, cuidados) y no contar con los recursos y las medidas básicas para hacerlo. 

Foto: Fabiola Aravena y Vania Reyes
Todo lo anterior constituye formas de violencias institucionales invisibles y peor aún, legitimadas social y culturalmente, a través de los fundamentos ideológicos que subyacen en las prácticas culturales del sistema sexo/género, y que lamentablemente nadie ha visto durante estos dos años y nadie verá sino es a partir del trabajo de las mujeres y la ciudadanía informada que debe exigir una política pública para la reconstrucción con un enfoque de derechos humanos, equidad de género y justica social.