miércoles, 28 de diciembre de 2011

Conmemoración día internacional de la Mujer 08 de Marzo 2011

A casi un año de la Conmemoración ciudadana del día internacional de la Mujer, el 08 de Marcho de 2011, la violencia hacías las mujeres y las demandas por una reconstrucción justa y ciudadana, siguen esperando. 



Gentileza: Alexis Martines 

25 de Noviembre: Marchando en Talca por la no violencia hacía las Mujeres

El 25 de Noviembre se conmemora el día internacional 
por la No Violencia hacías las Mujeres.

La Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule, marchó junto a hombres y mujeres de la región, manifestándose contra la evidencia más clara de la discriminación de Género.
Por la vida y la dignidad de las Mujeres, ni una muerta más !




Gentileza de Alexis Martines 

martes, 20 de diciembre de 2011

DECLARACIÓN PÚBLICA Brutal Represión a Damnificadas y Estudiantes por escolta Presidencial en Talca

Amigos/as la delegación presidencial de Sebastián Piñera tomo detenidas esta mañana a Marlene Ávila y Pilar Bustos del movimiento ciudadano “Talca con todos y todas” y dirigentas del MOVIMIENTO NACIONAL POR LA RECONSTRUCCIÓN JUSTA. Fueron detenidas junto a 4 estudiantes de Derecho de la Universidad de Talca e integrantes del frente amplio por la Educación de Talca. Estaban en el acto presidencial en el Estadio Fiscal que hoy fue inaugurado y fueron detenidos de forma arbitraria por la escolta de Piñera en un confuso incidente.

Marlene, Pilar y los/as estudiantes de derecho fueron liberados por la tarde, luego de constatar lesiones, pues efectivamente fueron muy golpeados.

Estuvieron esposadas/as, como delincuentes en todo momento y fueron tratadas/as muy mal por parte de carabineros y la escolta de Piñera. Incluso fueron llevados/as esposados/as hasta el Hospital Regional para constar lesiones.
Además las/as habían dejado libre en 2 ocasiones y las/as volvieron a detener saliendo de la comisaria.

Este fue un hecho arbitrario e injusto que coarta la expresión democrática de expresar con total propiedad nuestras demandas frente a la problemática de la reconstrucción nacional, que día a día vivimos los/as damnificados/as por el terremoto y tsunami del 27 F del 2010, porque sólo existe un 10% de reconstrucción en nuestra regiones y no un 60% como señala la autoridad.

Han pasado casi 2 años de la tragedia y aún no tenemos reconstrucción en nuestro país. Sabemos que tendremos que pasar un tercer año en las mismas condiciones, un tercer invierno en mediaguas y en condiciones indignas. Vemos con mucha impotencia que los únicos beneficiados son las inmobiliarias con la especulación y los grandes empresarios con las expropiaciones de nuestros terrenos, ganados sacrificadamente con el trabajo de toda una vida, y que ahora compran pagando una miseria por las casas y terrenos, y además llevándonos a la periferia... 


Vecinos/as nosotros/as no merecemos esto. LA NATURALEZA NOS ARREBATÓ NUESTROS HOGARES Y ESTE GOBIERNO NO NOS QUITARÁ NUESTRA DIGNIDAD !!!

Rechazamos como MNRJ la brutal represión que sufrieron nuestras dirigentas y estudiantes solo por manifestar un simple grito que decía ¿Y LA RECONSTRUCCION CUANDO? ¿Cuál es la mentira y ofensa para la actual administración, que efectivamente ha sido inoperante en temas de reconstrucción?

Llamamos a todas las organizaciones y localidades a repudiar este acto de cobardía del gobierno de Sebastián Piñera y expresamos nuestra absoluta solidaridad con las dirigentas y estudiantes.

MOVIMIENTO NACIONAL POR LA RECONSTRUCCIÓN JUSTA

MOVIMIENTO CIUDADANO TALCA CON TODOS Y TODAS

AGRUPACIÓN DE ORGANIZACIONES DE MUJERES DEL MAULE

viernes, 9 de diciembre de 2011

Agrupación en Seminario Internacional "Vulnerabilidades en Emergencia"


El Seminario-Taller Internacional "Vulnerabilidades en Emergencia: Las nuevas y viejas vulnerabilidades en situaciones de desastres socio-naturales", realizado el día martes 06 de Diciembre, en la ciudad de Santiago, fue organizado por el Núcleo Milenio Centro de Investigación en Vulnerabilidades y Desastres Socionaturales (CIVDES) junto al Subprograma Domeyko Política, Pobreza y Exclusión Social, de la Universidad de Chile.


El propósito del encuentro se centró en el debate respecto de las modalidades de expresión y funcionamiento de la vulnerabilidad social en comunidades que han sufrido catástrofes nacionales, profundizando en los impactos sociales de los desastres tanto a nivel subjetivo, de las condiciones estructurales de vida, como a nivel de funcionamiento de la política pública.

Yafza Reyes, vocera de la Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule, fue invitada como panelista en la Mesa de "Organizaciones sociales y desastres Socio-naturales", junto a Ignacio Pérez, de "Un Techo para Chile"; Pedro Adrians de "Caritas Chile"; y María José Gutiérrez, quien expuso sobre la experiencia de acompañamiento de adultos/as mayores desplazados a Puerto Montt, tras la evacuación de la población de Chaitén, producto de la erupción del Volcan del mismo nombre, en 2008.

Reyes expusó la situación de la mujeres en el Maule tras el terremoto y posterior tsunami y cómo han aumentado las violencias hacía ellas tras la ausencia de políticas públicas en los planes de reconstrucción y la entrega de ésta última, al mercado inmobiliario. 

Asimismo destacó la labor de las Mujeres, en contención y reposición de necesidades básicas para la ciudadanía maulina, desde el momento mismo de la catástrofe.

Finalmente Yafza Reyes dio a conocer la "Agenda de las Mujeres para una Reconstrucción con Equidad" y los desafíos de la Agrupación, de cara a las próximas elecciones municipales, en el afán de lograr una reconstrucción ciudadana y con equidad de Género.


Las mesas de debate estuvieron compuestas por:

Aproximaciones al estudio de la vulnerabilidad: Lo general y lo específico en los procesos de vulnerabilidad social 
Giovannina Giuliano del ISFOL - Ministerio del Trabajo y Políticas Sociales, de Italia; Adriana Espinoza (U. de Chile) y Mauricio Rosenblüth, Director Propuestas País, Fundación para la Superación de la Pobreza.

Las políticas públicas y la vulnerabilidad en situaciones de emergencia
 Eduardo Aguilera (Alcalde de Tomé), Pedro Vásquez (alcalde de Chaitén), Walter Imilan (Observatorio de Reconstrucción), Claudia Espinoza Lizama (Universidad del BíoBío).

Organizaciones sociales y desastres Socio-naturales
Ignacio Pérez, Un Techo para Chile; Yafza Reyes Muñoz, Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule; Pedro Adrians, Caritas Chile; y María José Gutiérrez.

Declaración Publica, por dichos del Presidente Piñera

La Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule, lamenta profundamente los dichos del señor presidente de la República, Sebastían Piñera, en la XIII Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se realizó en México el pasado 06 de Diciembre, al comparar a las mujeres con los políticos.

"Cuando una dama dice que 'no', quiere decir 'tal vez', cuando dice 'tal vez' quiere decir que 'sí' y cuando dice que 'sí', no es dama".

Los dichos de su excelencia, dan cuenta no sólo de una cultura machista, patriarcal y misógena asociada a la "nueva forma de gobernar", sino que además, son un insulto a los enormes esfuerzos que se han llevado a cabo las mujeres y sus organizaciones en los últimos 40 años, para erradicar todas las formas de violencia hacía las mujeres, tal como lo señala La Convención Interamericana para Prevenir, Erradicar y Sancionar la Violencia contra la Mujer de Belem do Para (Brasil, 1994), que nuestro país ha firmado y ratificado.

Los dichos del presidente Piñera constituyen un nuevo tipo de Violencia Institucional que se ha evidenciado con demasía en nuestra región tras la ausencia de políticas públicas para la reconstrucción y tras la negación de la voz ciudadana en los planes para la misma.

Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule

jueves, 8 de diciembre de 2011

Declaración pública Mujeres asesinadas

Por Benedicta Aravena

Es penoso sacar cuentas de un fin de semana con tres mujeres muertas en nuestro país: una en Talca y dos en Paine, donde nos encontramos con estándares internacionales para erradicar este flagelo que afecta a nuestro país.
La Convención Interamericana para Prevenir, Erradicar y Sancionar la Violencia contra la Mujer Belem do Para, 1994 en Brasil, define la violencia contra las mujeres como “cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado”.
Cada vez es mayor el número de mujeres que denuncia a su marido o conviviente, como lo demuestran las más de 120 mil denuncias efectuadas en el último año. Sin embargo, las mujeres que denuncian no siempre reciben una protección efectiva: este año un 18% de las que fueron asesinadas contaba con medidas cautelares.

La ley de femicidio, aprobada en diciembre pasado, es insuficiente a la hora de dar cuenta real del femicidio, pues no considera a las jóvenes muertas a manos de sus pololos, ni a las mujeres adultas y niñas agredidas sexualmente, violadas y asesinadas por vecinos, conocidos o desconocidos. Se invisibiliza así una parte significativa de esta realidad. La solución que da la justicia a las mujeres agredidas no responde a sus necesidades de protección y reparación.

Recientemente, el pasado 25 de noviembre, la Red Chilena contra la Violencia Domestica y Sexual convocó a las mujeres a no tolerar ninguna agresión machista, a romper con la pasividad y la victimización. A responder con fuerza ante las agresiones machistas vengan de donde vengan: si agreden a una, respondamos todas.
Llamó a todos los sectores sociales y políticos, a no ser cómplices, a rechazar el machismo y la violencia hacia las mujeres en cualquiera de sus manifestaciones; al gobierno, a construir información que permita conocer la magnitud de la violencia hacia las mujeres, y a aumentar el gasto público en políticas que enfrenten seriamente el problema.
“Por la vida de las mujeres… ni una muerta más”.

viernes, 2 de diciembre de 2011

LA RECONSTRUCCIÓN COMO PROCESO SOCIAL Y VINCULANTE CON PERSPECTIVA DE GÉNERO: La oportunidad de la ciudadanía y de las mujeres

“Los desastres exponen las inequidades preexistentes en una sociedad, y ello es válido tanto para los temas de género como para cualquier otro tema de relaciones de poder – socio económico y político, incluyendo las relaciones intimas -, y en cualquier ámbito territorial: global, nacional, regional o local” (Enarson y Morrow, 1998: 2).

Desde esta perspectiva, la concepción de los desastres se ha ido modificado en los últimos años y cada vez más, se les considera como resultado de complejos procesos sociales multicausales, consecuencia a su vez, de condiciones vulnerables preexistentes construidas socialmente a través del tiempo en un territorio específico que se ven expuestas al impacto de un peligro o amenaza natural, socionatural o directamente inducido por la sociedad (socio-organizativo, tecnológico, químico-sanitario, entre otros) (García, 1997).

Esas vulnerabilidades socialmente construidas más las amenazas naturales y los efectos de la catástrofe del 27 de Febrero de 2010 han expuesto de manera específica las inequidades de género existentes en nuestro país, a pesar de los esfuerzos y recursos asignados y ocupados para su desaparición.

Queda de manifiesto en este sentido, que las desigualdades sociales y especialmente las desigualdades de género aún son abismantes y peor aún, invisibles ante la lógica de desarrollo económico y social que exporta nuestro país, ante organismos internacionales (ejemplo claro la incorporación de Chile a la OCDE - Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico).

Desde esta lógica de crecimiento económico pomposo y grandes ínfulas desarrollistas, la ciudadanía en general debe ser marginada, silenciada, vulnerada y victimizada, de manera tal de que no genere ni represente trabas al maridaje económico-político actual.

El cerco comunicacional y la censura abierta y descarnada que sufren los/as damnificados/as de Chile tras el terremoto/tsunami en las regiones de Maule y Biobío, son evidencias explícitas de la violación al derecho de informar la realidad vivida por los/as propios/as habitantes de estas regiones, pero además, de un derecho humano básico: vivir con dignidad.

Los hombres y mujeres afectados por la catástrofe del 27 de Febrero no recibieron durante el año 2010 la cobertura mediática que si acaparó el mundial de futbol de Sudáfrica, el rescate de los 33 mineros y la celebración del seudo bicentenario de la patria (otra prueba de la ignorancia general en la cual vivimos sumidos/as a diario por causa de un sistema neoliberal aborrecible, pero absolutamente perfecto en la consecución de sus objetivos). Ellos/as no salen en la prensa viviendo el día a día en las mediaguas, y cuando protagonizan “incidentes” mediáticos para aparecer en ella, son reprimidos y mostrados/as ante la ciudadanía olvidadiza, desmemoriada, y muchas veces insensibles, como perturbadores del orden público, aprovechadores del sistema, o sencillamente delincuentes. 


Los costos sociales, personales y humanos de cada una de las personas que aún no ha recibido y por bastante tiempo más, no recibirá soluciones, han sido devastadores y los costos de la lucha contra la indiferencia, la desigualdad y la invisibilización de sus realidades han sido aún peores.

El costo del compromiso social de las mujeres durante la emergencia y la posterior regularización de algunos de los servicios post terremoto; la tenacidad y la perseverancia en la lucha por la dignidad en la reconstrucción y la batalla contra las violencias urbanas (sociales y simbólicas) son hoy, los principales problemas con los cuales deben lidiar las mujeres y por su puesto, las organizaciones de mujeres que han sido inclaudicables, en el trabajo de resiliencia comunitaria y contención.

Analucy Bengochea[2] ha dicho en la región del Maule que “la resiliencia comunitaria es la capacidad que tenemos las personas de recuperarnos, de organizarnos, gestionar, realizar acciones y aprender a identificarnos como personas, qué pasa con nosotros, cómo podemos tener un buen estado de ánimo para trabajar en beneficio de nuestras comunidades y de la colectividad” (2010).

Esa capacidad de salir adelante que han tenido las mujeres en la región del Maule; esa capacidad de sacrificio, el aguante, la responsabilidad social surgidos por la socialización de género, parece ser la respuesta a sus reacciones de movilización y demandas en un contexto de ausencia de políticas públicas y de efectos perversos de un proceso de reconstrucción mercantil y privatizador que intenta interponerse de manera brutal en el Maule.

“El fin de semana de terror nos mojamas todos; se volaron los techos; se nos cayeron murallas y aún seguimos esperando las reparaciones… Que terrible es ser pobre… (Marlene)

Creemos que la reconstrucción requiere canalizar los presupuestos destinados para tales efectos, a las prioridades sociales emergentes, así como también a las actividades que revitalicen los sectores económicos más afectados. Este presupuesto debe incluir necesariamente programas de generación de empleos (o bien reoiner los programas de emergencia para tales efectos como el de inversión directa en la comunidad del SENCE Mejor Trabajo); debe incluir además la reconstrucción de viviendas provisorias de calidad e infraestructuras vitales y viales. Del mismo modo debe considerar medidas de mitigación que reduzcan vulnerabilidades presentes y futuras y, sobre todo, que eviten reconstruir las falencias heredadas del pasado y las inequidades de género que tantas injusticias sociales han legitimado.

También es importante “no perder la oportunidad que brinda la recuperación y la reconstrucción post desastre, pues se tiene la legitimación para hacer cambios positivos y se cuenta con los recursos, prestados y canalizados, que pueden utilizarse no solo para salir del paso, sino para fomentar cambios institucionales y sociales que incluyan entre sus objetivos la equidad de género, la gestión ambiental sostenible y la justicia social, todo ello esencial para reducir la vulnerabilidad de la sociedad ante el riesgo de desastre…” (Castro García; 2005: 14 -15).

Desde esta perspectiva la ciudadanía es vital en la supervisión de estos presupuestos y de los asuntos que se desprenden a partir de la efectividad de los mismos. Por ello los pasos de la reconstrucción deben ser procesos y éstos deben ser eminentemente sociales, de manera tal que signifiquen oportunidades para construir capital social, aprendizajes, confianzas, y soluciones socialmente legítimas.

“Al momento que las organizaciones sociales se organizan, realmente toman el poder, dejan claro que están capacitadas por sí mismas, y que no necesitan a otras personas para hablar en su lugar, porque así se ganan las luchas” (Charlotte Mathivet; International Habitat Coalition; Pasantía Cauquenes) [3].

Por ello, lo social (las organizaciones de base, de la sociedad civil y las organizaciones de mujeres), debe ser el eje de la reconstrucción, pues no se trata sólo de reconstruir casas y barrios, sino de construir ciudad y ciudadanía, con enfoque de derechos y conciencia de género, de manera tal de posibilitar un nuevo modelo de desarrollo económico tanto urbano como rural, y repensar el tema de la autogestión y la propuesta de cooperativismo que en los años 60 existía en Chile, por ejemplo.

Los desafíos en este camino es reconstituir y levantar fuerzas con las organizaciones sociales y reconocer las labores de estas organizaciones de base en las políticas públicas y principalmente visibilizar y reconocer el trabajo que han realizado las mujeres y que continúan realizando sin tregua y sin costos para el Estado.

Posicionar un enfoque de género en la reconstrucción es trascendental para evitar todas las falencias, las desigualdades, las inequidades y las privaciones que hemos mencionado anteriormente. “Necesitamos ejercer plenamente la ciudadanía, tenemos que participar. En esto siempre recordar la igualdad de género, es importante que estemos todos y todas en este proceso y esto conlleva igualdad, el que tengamos un programa participativo de planeación y seguimiento en todas las etapas de los planes de reconstrucción del gobierno” (Charlotte Mathivet; 2010).

Finalmente señalar que las autoridades deben entender que la reconstrucción no empieza ni termina con la reparación de infraestructura, sino con la reparación y reconstrucción humana de un pueblo, una ciudad y un país; y que en ese proceso las mujeres tenemos mucho que decir, pues hemos sido nosotras quienes, gratuitamente y a costo personal de nuestras emociones y salud, hemos liderado las acciones de regularización tras la catástrofe.

Las mujeres han sido quienes mayoritariamente están luchando en los comités de vivienda, de damnificados/as, de reposición de servicios básicos, entrega de información, contención y visibilización de la situación actual que afecta a una parte importante de ciudadanos/as entre el Biobío y la Villa Olímpica. Y son ellas justamente, quienes menos apoyo han recibido, quienes menos trabajo han conseguido, quienes menos oportunidades y proyecciones tienen y quienes más han sufrido las violencias producidas por la catástrofe del 27 de Febrero, la ausencia de políticas públicas para la reconstrucción, el maridaje político económico actual, y los efectos perversos de la reconstrucción mercantil y privatizadora que se cuela silenciosamente a vista y paciencia de todos y todas.

La consolidación de la Agrupación de Organizaciones de Mujeres del Maule, es una apuesta clave en este proceso y continuaremos nuestro trabajo para enfrentar las próximas elecciones municipales y hacer incidencia política efectiva.

Todo lo anterior de cara a una reconstrucción con equidad de género y justicia social, de manera tal de hacer frente a un sistema político económico que insiste en la negación de la ciudadanía por el auge del mercado de capital, acrecentando la brecha entre hombres y mujeres y con ello el posicionamiento de una jerarquía de desigualdades.

La reconstrucción justa y con equidad de género debe ser una opción de la ciudadanía maulina y en ello, las mujeres tenemos mucho que aportar, decir y decidir. 

REFERENCIAS 

[2] Integrante del Comité de Emergencia Garífuna, Campaña de Reducción de Riesgos de Desastres y Resiliencia Comunitaria de Comisión Huairou y GROOTS, Honduras, de visita en la Región del Maule en Junio – Julio de 2010.

[3] Charlotte Mathivet de HIC, International Habitat Coalition, en Proyecto de pasantías sobre “Experiencias ciudadanas de la Reconstrucción”, realizado en la comuna de Cauquen
es en Noviembre de 2010.